¡BIENVENIDOS!

Este es un blog dedicado a la FE CATÓLICA de siempre. Contáctanos si deseas a: propaganda.catolica2@gmail.com

sábado, 13 de abril de 2019

REFLEXIONES CUARESMALES PARA CADA DÍA. Sábado de Pasión. Reflexiones.

Sábado de Pasión. Reflexiones.
(Lección del profeta Jeremías 18, 18-23)

Venid, hirámosle con los tiros de nuestras lenguas, y no hagamos caso de nada de lo que nos dice. Ved aquí a lo que se reduce todo el odio, toda la rabia de los enemigos de la virtud contra las personas devotas. Desprecios insolentes de sus sabios consejos y de sus buenos ejemplos, sátiras picantes, chanzas frías y enfadosas, discursos extravagantes y negras calumnias: estas son las armas y estos los medios indignos de que el mundo, de que el libertinaje y de que la herejía se sirve para vengarse de la incomodidad que les ocasiona la verdadera virtud por su exacta probidad, y del sonrojo que les causan las gentes de bien por la pureza de sus costumbres, por el resplandor de su devoción y por sus grandes ejemplos. No hagamos caso de lo que nos dice. Una vida inocente, una conducta irreprensible, religiosa, y una devoción sólida son lecciones mudas pero elocuentes y patéticas, incapaces de gustar a los mundanos y a los libertinos, porque los avergüenzan y los incomodan con la continua reprensión que les dan sobre sus desbarros, y porque les echan en cara a toda hora su insigne locura. Se pregunta: ¿De dónde viene que los impíos han mostrado siempre tan mal humor contra las personas devotas, aunque la modestia y la reserva de estas, no menos que su espíritu de retiro y de soledad, deberían ponerlas al abrigo del odio de los libertinos? Pero ¿Quién no ve que es esto mismo lo que los exaspera? Quien inflama su bilis es aquella regularidad de costumbres y aquella conducta de tanta edificación que advierten en las personas devotas. Ninguna cosa desacredita tanto al vicio como la virtud. Este contraste y paralelo pone a la vista y saca a la luz todo lo que hay de más irreligioso, de más defectuoso y de más indigno en la conducta desarreglada de las personas mundanas; a más que el resplandor inseparable de la virtud penetra hasta en el fondo de sus conciencias, donde causa, mal que les pese, crueles remordimientos. Irritados furiosamente contra los que vienen a turbar así su funesto reposo, se encolerizan, se amotinan, conspiran contra el justo, y quisieran exterminarlo de sobre la tierra, para que no hubiese quien los turbase en su falsa seguridad. A falta de otras armas emplean los tiros de sus lenguas para herirlos. No hay acción buena en el justo que no la oscurezcan: no hay obra buena que no desacrediten, ni ejercicio de devoción de que no murmuren y de que no se fisguen neciamente. Si su negra malicia no puede oscurecer una conducta y una probidad, que todo hombre racional aplaude y alaba, piensan hacer presa de la intención y de los motivos; y viéndose tan horrorosos y tan disformes, así a su vista como a los ojos de todo hombre cristiano, querrían a lo menos persuadir a los simples, que no hay verdadera virtud sobre la tierra. De ahí nacen esas murmuraciones, esas conversaciones impías y esas horrendas calumnias. Pero ¿Qué puede toda su malignidad contra la verdadera virtud, cuando esta no es capaz de ser oscurecida sino para unos espíritus ciegos? Lo que hace la virtud en el corazón corrompido de los libertinos, lo hace la verdad en el espíritu inficionado de los herejes: quien los anima contra los católicos no es otro que el espíritu de error: sus eternas calumnias son la prueba más clara de sus desbarros y de sus errores.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario